Las rocas del Corb y de Sant Honorat, situadas dentro del municipio de Peramola, formadas con conglomerados que nos recuerdan a la montaña de Montserrat, son dos formaciones de orografía compleja y espectacular relativamente desconocidas. En este recorrido circular, que empieza en el Hotel Can Boix, y complementando la riqueza paisajística, encontraremos una serie de expresiones patrimoniales de carácter muy singular. Una de ellas es la casa del Corb, una vivienda construida dentro de una balma, con la fachada de tapia, donde todavía vivían a principios del siglo XX. Cerca de allí, en lo alto de la Roca del Corb, permanecen los restos de la iglesia románica de Sant Salvador, del siglo XI, considerada como una de las más pequeñas de Cataluña de este estilo. Por otra parte, las Rocas de Sant Honorat están coronadas por la ermita homónima, del siglo XVIII, situada cerca de unos precipicios de vértigo.